La importancia de dormir (bien) | The importance of (good) sleeping

El sueño juega un papel crucial en el desarrollo saludable y el bienestar de los niños.

El porcentaje de niños que obtienen la cantidad recomendada de sueño varía según los países y los grupos de edad. En Canadá, datos de 2014-2015 indican que aproximadamente el 70.7% de los niños y jóvenes cumplían con las recomendaciones de duración del sueño, que especifican de 9 a 11 horas por noche para edades de 5 a 13 años y de 8 a 10 horas por noche para edades de 14 a 17 años. Health Infobase

En Inglaterra, una encuesta de 2023 reveló que el 37.8% de los niños de entre 8 y 16 años experimentaron problemas de sueño tres o más veces en la semana anterior. Esto sugiere que una porción significativa de niños puede no estar logrando un sueño adecuado de manera regular. NHS England Digital

A nivel mundial, el cumplimiento de las pautas de sueño entre los niños es preocupante. Un estudio destacó que solo alrededor de 1 de cada 7 niños en el mundo cumple con las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud sobre actividad física, comportamiento sedentario y sueño. Home – University of Wollongong – UOW

Estas estadísticas subrayan la importancia de promover hábitos de sueño saludables en los niños para apoyar su bienestar y desarrollo general.

Algunos impactos positivos clave del sueño en los niños:

1. Desarrollo Cognitivo y Aprendizaje
   • Consolidación de la memoria: El sueño fortalece la capacidad del cerebro para retener y consolidar información, ayudando a los niños a desempeñarse mejor en la escuela.
   • Enfoque y atención: Dormir lo suficiente mejora la concentración y las habilidades de resolución de problemas, reduciendo el riesgo de trastornos de atención.
2. Crecimiento físico
   • Liberación de la hormona del crecimiento: Durante el sueño profundo, el cuerpo produce la hormona del crecimiento, esencial para un desarrollo físico saludable.
   • Reparación de tejidos: El sueño contribuye a la curación y reparación de músculos, tejidos y células.
3. Regulación emocional
   • Reducción del estrés: El sueño disminuye las hormonas del estrés, ayudando a los niños a manejar mejor sus emociones y reduciendo berrinches o cambios de humor.
   • Mejor interacción social: Los niños bien descansados tienden a mostrar comportamientos positivos, empatía y paciencia.
4. Fortalecimiento del sistema inmunológico
   • Dormir lo suficiente refuerza el sistema inmunológico, haciendo que los niños sean menos propensos a enfermedades como resfriados e infecciones.
5. Beneficios conductuales
   • Los niños con buenos hábitos de sueño tienden a tener un mejor comportamiento, menos impulsividad y mayor resiliencia emocional.
6. Manejo saludable del peso
   • Un sueño adecuado ayuda a regular hormonas como la grelina y la leptina, que controlan el hambre y el apetito, reduciendo el riesgo de obesidad.
7. Apoyo a la salud mental
   • El sueño reduce los síntomas de ansiedad y depresión, fomentando una sensación de bienestar y felicidad.
8. Energía para actividades diarias
   • Un buen descanso garantiza que los niños tengan energía para jugar, aprender y participar en actividades creativas y físicas.

Estableciendo rutinas de sueño saludables, los padres y cuidadores pueden ayudar a los niños a prosperar física, emocional y cognitivamente.

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Sleep plays a crucial role in the healthy development and well-being of children. 

The percentage of children who obtain the recommended amount of sleep varies across different countries and age groups. In Canada, data from 2014-2015 indicates that approximately 70.7% of children and youth met the sleep duration recommendations, which specify 9-11 hours per night for ages 5 to 13 years and 8-10 hours per night for ages 14 to 17 years. Health Infobase

In England, a 2023 survey found that 37.8% of children aged 8 to 16 experienced sleep problems three or more times in the previous week. This suggests that a significant portion of children may not be achieving adequate sleep on a regular basis. NHS England Digital

Globally, adherence to sleep guidelines among children is concerning. A study highlighted that only about 1 in 7 children worldwide meet the World Health Organization’s recommendations for physical activity, sedentary behavior, and sleep. Home – University of Wollongong – UOW

These statistics underscore the importance of promoting healthy sleep habits among children to support their overall well-being and development.

Here are some key positive impacts of sleep in children:

1. Cognitive Development and Learning

• Memory Consolidation: Sleep strengthens the brain’s ability to retain and consolidate information, helping children perform better in school.
• Focus and Attention: Adequate sleep improves concentration and problem-solving skills, reducing the risk of attention disorders.

2. Physical Growth

• Growth Hormone Release: During deep sleep, the body produces growth hormone, which is essential for healthy physical development.
• Tissue Repair: Sleep aids in healing and repair of muscles, tissues, and cells.

3. Emotional Regulation

• Reduced Stress: Sleep lowers stress hormones, helping children handle emotions better and reducing tantrums or mood swings.
• Improved Social Interactions: Well-rested children are more likely to exhibit positive behaviors, empathy, and patience.

4. Strengthened Immune System

• Adequate sleep boosts the immune system, making children less susceptible to illnesses like colds and infections.

5. Behavioral Benefits

• Children with good sleep habits tend to have better behavior, less impulsivity, and greater emotional resilience.

6. Healthy Weight Management

• Proper sleep helps regulate hormones like ghrelin and leptin, which control hunger and appetite, reducing the risk of obesity.

7. Mental Health Support

• Sleep reduces anxiety and depression symptoms, fostering a sense of well-being and happiness.

8. Energy for Daily Activities

• Adequate rest ensures children have the energy to play, learn, and engage in creative and physical activities.

By establishing healthy sleep routines, parents and caregivers can help children thrive physically, emotionally, and cognitively.